Soy un alma polvorienta

A pesar de lo que crean
soy un alma polvorienta,
me arrastré por los caminos
y descansé en sus veredas.

Si, mi piel es dura y seca,
y mis pies estan torcidos
de tantos pasos mal dados
en empedrados caminos.

Porque en lugar de construirme un hogar
de piedra y rejas
elegí caminar sin cesar hasta encontrarte.

Y me olvido de mi misma,
y a veces lloro,
y a veces grito,
pero la fuerza que me impulsa es poderosa.

Tan polvienta y ajada, soy invisible.
Nadie se da cuenta...
mi cabello polvoriento se agita al viento;
busco una nube,
busco un aliento,
busco el sol y el viento.

Como aquel loco de la colina
que veía el mundo girar
este alma polvorienta
amigo mio, no te olvida.

En mitad de su camino, te sonríe
En mitad de su camino, te acompaña
En mitad de su camino, te busca, y a veces te encuentra.

Esta soy yo, a fin de cuentas:
una dulce y enlodada alma polvorienta...